Los municipios de Aras de los Olmos y Titaguas, Alpuente y La Yesa ha sido declarados Reservas Starlight y de este modo son reconocidos por su cielo limpio de contaminación lumínica. La finalidad es convertirse en “Destino Turístico Astronómico” según la certificación que otorga la Fundación Starlight. Las Reservas Starlight deben tener una muy baja densidad de población, en muchos casos incluso menor a los 8 habitantes/km cuadrado, de manera que se evite la contaminación lumínica o esta sea muy baja.
La zona de los municipios de Aras y Titaguas cuenta con los mejores observatorios astronómicos a nivel nacional, que realizan jornadas de puertas abiertas y sesiones formativas y que han dado un salto de calidad en la mejora de los servicios en su vertiente turística. Como muestra, en Aras de los Olmos se han realizado tres festivales de astronomía: en 2006 tuvo lugar una Star Party con la Campus Party de ese año y se celebran encuentros internacionales sobre diversos temas de Astronomía, (VI Encuentro Ibérico de Astrosismología) o se convocan numerosos cursos en esta especialidad dentro del programa de créditos de libre elección de las Universidades.
Aras de los Olmos es un lugar de gran importancia para el mundo de la astronomía gracias a la calidad de su cielo, uno de los más limpios de España, y libre de contaminaciones lumínicas. Este hecho hizo que la Asociación Valenciana de Astronomía, conjuntamente con el Observatorio Astronómico de la Universidad de Valencia decidieran instalar en la Muela de Santa Catalina el Centro Astronómico del Alto Turia (CAAT), convirtiendo a Aras de los Olmos en un importante lugar de encuentro de aficionados e incluso profesionales de la Astronomía. El lugar seleccionado para emplazar el observatorio es una meseta a 1300 m de altura sobre el nivel del mar, con un desnivel de más de trescientos metros sobre el terreno que la rodea y suficientemente alejada de cursos fluviales. Estas condiciones orográficas del emplazamiento, unidas a su clima con importantes características de continentalidad, proporcionan la estabilidad atmosférica necesaria para la observación astronómica.