Álex de la Iglesia: “En la película El Bar se precipita la acción y el conflicto en un entorno cerrado”
Encerrados en un bar donde todo empieza con un disparo, este es parte del argumento de la película que está rodando actualmente Álex de la Iglesia y que está protagonizada por Mario Casas, Blanca Suárez, Carmen Machi, Secun de la Rosa o el actor valenciano Diego Braguinsky
¿Cómo está yendo el rodaje de estos días en Valencia?
Álex de la Iglesia: Muy a gusto, rodando una serie de secuencias complicadas sobre todo por el espacio, estamos rodando en un plató, es un momento de la película bastante complicado, nos está costando mucho a nivel técnico, cosa que es muy divertida porque en eso consiste rodar, en ponerte complicaciones y salir adelante. Aquí en Valencia llegamos el día 8 de marzo y vamos a estar hasta el 22 de marzo, creo, está siendo una parte indispensable de la película.
¿Se puede saber qué escenarios hay?
Álex: Prácticamente toda la película son interiores, hemos rodado parte del bar en Madrid y otra parte aquí en Valencia, por una cuestión no os puedo contar, prácticamente toda la película se desarrolla en un bar.
Hay alguna similitud con tus películas anteriores ¿Qué hay de especial en meter a un grupo de personas en un sitio cerrado?
Álex: Es un truco narrativo, en el momento que los personajes se encuentran en un entorno cerrado tienen que tomar una serie de decisiones para poder sobrevivir, eso precipita la acción y el conflicto. Me gusta mucho la teatralidad, que las historias sean como pequeños dramas teatrales, este concretamente podría ser una obra de teatro.
¿Cuál es la película que más te ha influido a la hora de hacer este tipo de rodajes?
Álex: Hay veces que pienso que una de las películas que más me ha influido ha sido “La Cabina”, es una especie de cabina con más gente, pero también podría ser “Río Bravo” o “El Dorado”, “Asalto a la comisaria número 13” y tantas películas que forman parte de este género, yo lo llamaría género cinematográfico, hay muchas películas que beben de esta estructura narrativa, de este reto narrativo. El estar en un lugar concreto te permite hacer mucho hincapié en los personajes, en lo que dicen, hacen, cómo se mueven. Esta película es un reto a nivel de dirección muy atractivo, poder conseguir que el espectador se sienta en muchos sitios muy diferentes todo el rato.
¿Contáis la vida cotidiana en un bar?
Álex: No es una película donde contamos la vida cotidiana de un bar, cuando la veáis, lo veréis, pero sí que es cierto que utiliza ese lugar como un instrumento para contar otra cosa. El que haya un montón de personajes absolutamente heterodoxos dentro de un bar de alguna manera ejemplifica un tipo de sociedad en concreto, esa especie de barullo en el que vivimos en el que no sabes muy bien con quién estas, ni sabes muy bien quién es la persona que está a tu lado, profundizar en esa idea me parece muy interesante. Igual en la mesa de al lado hay un presidente de una empresa de informática que en este momento está cambiando el mundo y no lo sabes. Igual ahora hay una escena apasionante de amor en recepción y no lo estamos viviendo. Hay 10 mil historias que están ocurriendo al mismo tiempo y nosotros solo vemos la nuestra, no somos conscientes de las historias o dramas que puede haber a 5 centímetros de nosotros.
¿Qué papel tiene cada personaje?
Álex: En la película El Bar un grupo de gente por casualidad se encuentra atrapada en una situación siendo todos totalmente distintos unos de otros. Blanca Suárez hace de Elena que es una chica que ha quedado con alguien por Internet y se ha quedado sin batería en el móvil. Mario Casas es un creativo de una agencia de publicidad que suele ir a ese bar porque para él es moderno, entre comillas, es un lugar como muy autentico y le encanta por eso. Carmen Machi es una mujer que se gasta todo el dinero que tiene en las máquinas, algunos dicen que eso es ludopatía y a ella le parece bien, que es una cosa estupenda para pasar las 24 horas del día, además le facilita una cosa que es no ver a la gente, te pones a jugar a la máquina y no ves a nadie. Así el resto de personajes, Diego Braguinsky es un oficinista con no mucha suerte, Secun de la Rosa trabaja con Terele Pávez que es la dueña del local, fundamentalmente lo que hace en la vida son Sándwichs mixtos las 24 horas del día.
¿Cómo surgió la película?
Álex: Esta historia Jorge Guerricaechevarría y yo empezamos a pensarla entre “El Día de la Bestia” y “Perdita Durango”, estábamos dando vueltas a la idea de contarlo, luego hicimos “La Comunidad” que es una película también de un encierro en un edificio. Estábamos pensado en la idea de qué pasaría si de repente cierras las puertas de un bar, no dábamos con el conflicto hasta que paso algo en este país que de alguna manera nos sirvió de pie para desarrollar la historia, yo creo que lo descubriréis cuando veáis la película y rápidamente diréis “oh Dios mío, es eso”.
Mario ¿Álex es muy exigente?
Mario Casas: Álex es exigente, le gusta su trabajo y lógicamente ahí hay parte de exigencia siempre, pero va a ser el tercer personaje que hago con él tras “Las brujas de Zugarramurdi” y “Mi Gran Noche”. Este personaje es el más pegado a la realidad, es un tipo normal que está construido como una moda, como mucho, al final la gente se pone una coleta, la gente empieza a dejarse unas barbas enormes y así va media España. Al final no es solo hacer un código del hipster que conocemos sino que es una máscara, es muy importante en la película que todos van a empezar vestidos o con muchas capas y durante toda la historia, que va a llegar a límites bastante fuertes para todos, se van a ir quitando ropa, y lo que lleva mi personaje Nacho es una máscara, esa máscara es una barba, un pelo, unas gafas.
Mario ¿Ha sido difícil ponerte en la piel de este personaje?
Mario: Es el personaje más de verdad y más complicado de los tres que hemos hecho hasta ahora.
Álex ¿Qué nos puedes decir del personaje que interpreta Mario Casas?
Álex: Yo estoy fascinado con el personaje de Mario porque lo estamos construyendo en este mismo instante, cuando creas un personaje está de alguna forma embrionario, en el guión, pero cuando tú lo pones delante de la cámara y cobra vida, todos los días nos asombramos. Con Mario Casas solemos hablar de una manera muy curiosa porque hablamos del personaje en tercera persona, vamos disfrutando los dos de este personaje que de repente se convierte en alguien muy reconocible, incluso ya hablamos de él como si existiera, como si tuviera vida propia, eso es hacer cine y la parte más atractiva del trabajo, descubrir como los personajes van construyendo su propia vida.
Después de hacer coincidir a varios de los actores en tus películas ¿Hay más confianza?
Álex: La confianza genera profesionalidad, esa es la clave, la mejor manera de trabajar con alguien es conocerle profundamente, eliminas un montón de tiempo que pierdes con un trato más frío. Puedes exigir mucho más porque ya entiendes y comprendes al actor, eso facilita mi trabajo, es un truco para poder hacer el trabajo más complejo y más duro. Lo bueno de hacer cine es que de repente se convierte en tu vida y en tu vida quieres tener a gente cercana con la que disfrutar y trabajar al mismo tiempo, es muy importante generar esa familia.
Blanca, Carmen, Álex ¿Cómo está siendo el rodaje?
Blanca Suárez: En el rodaje es verdad que se respira mucha confianza para lo bueno y para lo malo, con esto me refiero que cada uno acaba siendo como es, tengas un buen día o malo estas en familia, con una mirada te entiendes, te sientes muy agusto.
Carmen Machi: Además el rodaje tiene una peculiaridad, no siempre en los rodajes desde primera hora de la mañana a última de la tarde está todo el equipo junto, aquí sí que estamos todas las horas juntos porque es fundamental, no podemos decir porqué, pero es así, es un rodaje que es fabuloso pero es incómodo, ese agotamiento favorece mucho el espectáculo y favorece a la unión del equipo.
Álex: En un día nos pasan muchas cosas, hay veces que recuerdas la mañana como si estuvieras pensando en algo que ocurrió hace una semana, esto cuando lo rodamos, hoy a las 8, qué dices, porque a las 12 hay un drama, a la 1 nos estamos riendo, a las 4 nos queremos morir, a las 7 dices pero quién es esta gente.
¿Cuánto está durando el rodaje?
Álex: Siete semanas, a mí me gustaría que durará más pero cada vez los rodajes duran menos, hay que trabajar más duro en menos tiempo, en definitiva rodar es una cuestión de administrar el tiempo, esa es mi función fundamentalmente. Administrar en que nos gastamos el esfuerzo, el sudor, el talento o las ganas en un tiempo determinado. Vamos a hacer este plano o este otro, a eso es a lo que me dedico. “Mi Gran Noche” también fueron 7 semanas, recuerdo que “Acción mutante” fueron 13 semanas.
Habéis estado grabando durante las fallas
Álex: No he estado nunca en fallas pero me gusta mucho el ruido, los explosivos, todo lo exagerado, aquí he estado como si estuviera en mi salsa, oír petardos por la calle es una cosa que me vuelve loco, me divierte, me enamora. Me gusta mucho el concierto de ruido sin más de la mascletà, no se ve nada más que una humareda brutal, me recuerda a los tambores de Calanda, esa manía que tenía Buñuel con los tambores de Calanda.
Los actores valencianos ¿Qué visión tienen?
Diego Braguinsky: Una visión buena, un placer, Álex eso de crear una familia le sale del corazón. La experiencia es maravillosa, tu sabes lo que es estar sentado al lado y en el mismo plano que Carmen Machi. Yo tengo un papel corto pero muy importante. La calidad está en todas partes, lo que pasa que unos están en el centro del país y otros estamos en la periferia, pero cuando nos mezclamos mola mucho.
¿Cuándo se estrenará?
Álex: No lo sé, yo creo que será a principios del año que viene, me imagino.
¿Hay mucho del teatro en la película?
Carmen Machi: La película se parece al teatro porque está hecho de tal manera que todos somos necesarios, necesitas mucho de tu compañero, pero de manera real, no solamente porque esté en plano. Absolutamente se podría hacer una obra de teatro, yo creo que sería buenísimo.
Alex de la Iglesia: Pero estamos coartados por la técnica cinematográfica, cuando montas un plano, igual los actores que te dan la réplica no caben en el plano y están en una esquina, tienen una serie de marcas que son difíciles a las que llegar, tienen que seguir unas pautas de movimiento muy complejas. Todo eso conforma una puesta en escena cada día más complicada, precisamente a mi es lo que me gusta hacer. Disfruto mucho con ellos porque necesitas a gente con mucha paciencia.